Santo Domingo. El merenguero Tulile, uno de los artistas más icónicos del merengue de calle, ofreció una entrevista reveladora con el periodista José Peguero en su canal de YouTube, donde compartió detalles sobre los altibajos de su carrera, el impacto de la fama en su vida personal y financiera, así como su visión sobre el estado actual del género.
En una conversación cargada de anécdotas y reflexiones, el intérprete de Cuca narró cómo pasó de llenar discotecas y realizar giras internacionales a enfrentar una crisis económica que lo llevó a replantear su futuro.
Desde sus inicios en la música, Tulile se caracterizó por su estilo irreverente y provocador, lo que le permitió destacar en un momento en que el merengue estaba dominado por figuras tradicionales. Con una propuesta fresca y atrevida, logró conectar con el público juvenil de la época, consolidándose como una de las caras más visibles del merengue urbano. Sin embargo, con el paso del tiempo, su vida tomó un rumbo inesperado que lo llevó a una caída abrupta.
Durante la entrevista, José Peguero lo cuestionó sobre los excesos que acompañaron su éxito, a lo que el artista respondió con franqueza. Admitió que durante sus años de mayor popularidad gastó enormes cantidades de dinero en fiestas, lujos y compañías pasajeras, sin preocuparse por el futuro.
Llegó a gastar hasta 20,000 pesos diarios en bebidas, comidas y atenciones a su entorno cercano, convencido de que la bonanza económica duraría para siempre. Tulile explicó que solía andar acompañado de un grupo de amigos que disfrutaban de su generosidad, pero que, con el tiempo, todos se alejaron cuando los ingresos comenzaron a disminuir.
El declive comenzó cuando decidió explorar un sonido más tradicional, alejándose del merengue de calle que lo había catapultado a la fama.
Según sus propias palabras, esto se debió en gran parte a las críticas de ciertos sectores del entretenimiento, quienes consideraban su música un «disparate». En un intento por demostrar su versatilidad, grabó canciones con un tono más romántico y comercial, lo que no fue bien recibido por su público original. Como resultado, sus presentaciones disminuyeron drásticamente, afectando su estabilidad económica.
En uno de los momentos más impactantes de la entrevista, Tulile confesó que llegó a un punto en el que, a pesar de haber sido un artista exitoso, no tenía dinero ni siquiera para comprar comida. Recordó cómo debía pedirle a un amigo que le fiara alimentos en el colmado del barrio, una experiencia que lo marcó profundamente. El artista expresó que la fama y el dinero son efímeros, y que cuando las cosas van mal, las personas que antes estaban a su alrededor desaparecen rápidamente.
Otro punto clave de la conversación fue la demanda legal que enfrentó por abandono de trabajo, lo que le impidió viajar a Estados Unidos durante ocho años. Tulile explicó que, en medio de la crisis, intentó retomar su carrera en el extranjero, pero sus propios músicos lo demandaron, exigiendo que se les compensara por los compromisos incumplidos. Para evitar problemas legales, permaneció en República Dominicana hasta que pudo resolver la situación.
Finalmente, cuando logró liquidar sus deudas, vendió su apartamento, su oficina y otros bienes para poder empezar de nuevo en Estados Unidos.
Al preguntarle sobre su regreso a la música, Tulile aseguró que nunca ha dejado de trabajar, aunque reconoció que el merengue ha perdido popularidad entre los jóvenes.
Explicó que uno de los mayores problemas es la falta de difusión, ya que hoy en día el público consume música a través de plataformas digitales como Spotify, Apple Music y TikTok, en lugar de emisoras tradicionales. En este sentido, admitió que muchos merengueros no han sabido adaptarse a esta nueva realidad, lo que dificulta la proyección del género.
El artista también habló sobre su experiencia con las redes sociales y cómo ha utilizado TikTok para revivir algunas de sus canciones. Mencionó que recientemente uno de sus temas más antiguos, Ustedes con su tiguera y yo con mi paloma, se viralizó en la plataforma, lo que le hizo darse cuenta del poder que tienen estas herramientas para llegar a nuevas audiencias. Según Tulile, el futuro del merengue depende de que los artistas se adapten a estas tendencias y conecten con el público joven.
Uno de los momentos más controversiales de la entrevista fue cuando José Peguero le preguntó sobre el impacto de artistas internacionales como Karol G, Bad Bunny y Manuel Turizo, quienes han incursionado en ritmos tropicales con gran éxito. Tulile expresó que estos artistas han sabido posicionar su música porque cuentan con estrategias de difusión efectivas, algo que muchos merengueros dominicanos no han logrado. Aseguró que el merengue sigue siendo un género con gran potencial, pero necesita mayor inversión en promoción para recuperar su espacio en el mercado global.
Sobre su futuro, Tulile reveló que está trabajando en nuevas propuestas musicales, incluyendo un tema titulado Olor a Cuca, con el que espera reconectar con su público y volver a posicionarse en la industria. Destacó que este tema mantiene su esencia provocadora, pero adaptada a las tendencias actuales, apostando por un sonido fresco y pegajoso.
La entrevista concluyó con una reflexión del artista sobre las lecciones que ha aprendido a lo largo de su carrera. Afirmó que si pudiera retroceder en el tiempo, manejaría su éxito con más prudencia y evitaría los errores financieros que lo llevaron a tocar fondo. También envió un mensaje a los nuevos talentos, instándolos a no dejarse influenciar por las críticas externas y a mantenerse fieles a su esencia.
Con esta conversación, Tulile dejó claro que, a pesar de los obstáculos, sigue firme en su compromiso con la música y confía en que pronto logrará un nuevo éxito que lo devuelva al lugar que una vez ocupó en el merengue dominicano.
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