En San Francisco de Macorís, Paloma Caridad Pérez y su hija Melanie Nicole Durán fueron afectadas por un trágico suceso. La familia denuncia negligencia médica.
En diciembre de 2024, la comunidad de San Francisco de Macorís vivió un evento trágico que involucró a Paloma Caridad Pérez Hernández, de 33 años, y su hija Melanie Nicole Durán, de 20. Ambas resultaron gravemente afectadas, siendo Paloma quien, tras herir a su hija con un trozo de botella, se suicidó.
Este trágico desenlace ocurrió después de una serie de comportamientos extraños que, según la familia, podrían haberse evitado con atención médica adecuada. Un reportaje de N Investiga profundizó en los hechos.
Según informes, el comportamiento extraño de Paloma y Melanie comenzó el 15 de diciembre, cuando ambas fueron vistas en el Bravo Liquor Store, mostrando signos de desorientación y alucinaciones.
En los días posteriores, su situación empeoró, presentando actitudes incoherentes que alertaron a los familiares. A pesar de estos síntomas, el Hospital Regional Universitario San Vicente de Paúl no brindó la atención necesaria.
Durante al menos cuatro visitas a urgencias, Paloma fue atendida sin recibir un diagnóstico adecuado ni el tratamiento urgente que requería. La tía de Paloma, Denia Hernández Durán, mencionó que el hospital solo administró líquidos intravenosos y les dio el alta, sin aplicar protocolos de salud mental.
“Ellas no estaban tomadas. Estaban alucinando. Estaban mal”, expresó Denia. Los médicos alegaron que no había camas disponibles en la unidad psiquiátrica, algo común en el hospital, que lleva años retrasado en la construcción de nuevas instalaciones.
Familiares indicaron que si los servicios de salud mental hubieran intervenido a tiempo, el trágico desenlace podría haberse evitado. El 19 de diciembre, después de varios días sin atención, Paloma hirió gravemente a Melanie y luego se suicidó. Melanie también intentó hacerse daño, pero sobrevivió y fue hospitalizada.
Este caso también reveló deficiencias en el hospital. A pesar de la gravedad de la situación, los familiares denunciaron la falta de reactivos en el laboratorio, lo que impidió realizar un examen toxicológico a Melanie para determinar si habían sido drogadas.
La carencia de recursos fue previamente denunciada en un reportaje de N Investiga. La directora de la Unidad de Intervención de Crisis del hospital, la doctora Milagros Sierra, se negó a dar una entrevista, pero afirmó que en el momento en que Paloma estuvo en el hospital, ella estaba de licencia médica. Sin embargo, esto fue desmentido, ya que Paloma sí fue recibida en Emergencias.
El caso está siendo investigado por la Fiscalía de la provincia Duarte, que enfrenta una situación compleja debido a la falta de resultados en los exámenes toxicológicos y la presunta negligencia médica.
La familia sigue esperando respuestas, especialmente el informe de la autopsia de Paloma, cuya entrega aún no se ha realizado.
“A Paloma le hicieron una autopsia, pero lamentablemente no sé cuánto dura, no me han informado nada”, expresó la tía.
Melanie está recibiendo atención especializada fuera de la región para tratar sus heridas físicas y su salud mental. Mientras tanto, los familiares luchan por obtener justicia y exigen medidas para evitar que esta negligencia se repita, ya que creen que la tragedia podría haberse evitado con una intervención a tiempo.
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